Desempolvo mi pobre blog que tan abandonado tengo fundamentalmente por motivos de tiempo y agenda, con la crónica del medio Ironman en el que participé el domingo pasado, espero como siempre que os guste y os entretenga :)
CRONICA MEDIO IRONMAN ORIHUELA "MIGUEL HERNANDEZ"
23 DE ABRIL DE 2017
Este año volvía a participar a
estas alturas de temporada en un medio Ironman, en este caso en la primera
edición del "Miguel Hernández" de Orihuela, que sustituía al desaparecido mítico triatlón de
Arenales, en el que participé el año pasado, dado que el Ayuntamiento de esta
localidad había decidido dejar de colaborar con el mismo, con lo que la
organización lo “trasladó” a la primera localidad reseñada.
Los perfiles de los mismos
cambiaban entre sí… si el circuito en bici del de Arenales era bastante rodador
y el running era una pesadilla, con tramos de escaleras y arena en la playa, el
de Orihuela tornaba a ser muy pestoso en la bici, repleto de cotas, toboganes y
repechos, mientras que la carrera a pie pasaba a ser prácticamente llana. Esto
en cualquier caso me venía muy bien porque el Ironman de Niza, gran objetivo de
la temporada, que afrontaré si no pasa nada el próximo 23 de julio, tiene este tipo de perfiles
como Orihuela, así que lo tomábamos como una especie de “medio” ensayo general,
aunque luego los ritmos y la mente deba funcionar de distinta forma para hacer
el doble de distancia en las tres disciplinas, claro está.
Mi casa se encuentra a 40 minutos
en coche del punto de salida, en Cabo Roig, podría haber dormido en casa sin
mucho problema, aún así decido buscar en los días previos un alojamiento baratillo
en algún punto más cercano y lo encuentro en San Pedro del Pinatar, a 15
minutos de la salida, lo que me supone ahorrar una hora de viaje entre la
vuelta el sábado y la ida el domingo, en estas cosas siempre es bueno guardarse
todas las balas posibles, especialmente en lo que al tiempo de descanso se refiere.
El primer triunfo respecto al año
pasado llegó la noche previa, donde el año pasado no pude dormir
sorprendentemente ni un minuto, entonces pagué la novatada de participar en mi
primer triatlón, la cabeza no paraba de centrifugar sobre todo el material y
cuestiones reglamentarias del mismo, y no pegué ojo en ningún momento, y correr
un medio Ironman en esas condiciones pues… demasiado bien me salió para presentarme
en la línea de salida así. Este año nada parecido, me acuesto a las 23:00 horas
después de recibir y contestar numerosos mensajes de ánimo de muchxs amigxs,
estaba bastante tranquilo y confiado de que los “deberes” estaban hechos, ha
sido un invierno duro, trabajando en especial dos disciplinas que no son las
mías en absoluto, como son la natación y la carrera a pie, días de pasar
miseria, días que tienes que entrenar sin ganas de hacerlo, de frío, viento e
incluso lluvia, donde solo apetece echarse en el sofá a ver una peli con los
gatos, y por supuesto otros días brillantes, donde ves los progresos y crece la
motivación. Siempre recuerdo las palabras de Juangre en su crónica del Ironman
de Niza 2011 donde decía que lo duro de un Ironman no es correrlo, sino
entrenarlo durante todo el año, cuanta verdad…
El sábado después de comer salgo
para allá, habiendo dejado a mis perros con mi buena amiga Dory, quedarme solo
y sin esas responsabilidades me viene bien para concentrarme de cara a la
prueba. Llego al hotel, he cogido como decía una habitación baratita que está
muy bien, sin embargo a la entrada del pasillo que da a las habitaciones tenían
un mural con motivos tauricidas, si lo llego a saber no les hubiera reservado, pero
ya lo había pagado previamente por medio de booking, me sabe muy mal dejarles dinero
a gente que disfruta y hace apología de la tortura y asesinato de un ser
inocente. Que coraje…
En fin… tras hacer el check-in en
el hotel, me voy para la Playa de la Glea de Campoamor, donde estaba la T1
(primera transición, donde sales del agua y coges la bici) y también las carpas
de inscripción y demás. Este triatlón es un poco particular porque usualmente
los circuitos de natación-bici-running suelen empezar y acabar en el mismo
punto y por tanto en los mismos boxes para hacer la transición entre una
disciplina y la otra, sin embargo en este se nadaba de una playa a otra, la
bici discurría entre la costa y Orihuela, que está hacia el interior, y allí
estaba el segundo box para acabar corriendo los 21 kilómetros a pie por las
calles de dicha ciudad, así que era todo un poco más follonero o laborioso. En
todo ello me ayudaría mi amiga Marta, que se vendría desde Murcia la mañana de
la prueba, pegándose un madrugón soviético una mañana de domingo para echarme
una mano y también para animarme. Me da tranquilidad en todo caso también el
saber que a ella también le gusta el deporte y disfrutar de este tipo de
eventos, más allá de la ayuda y ánimos que me presta.
Así que en la tarde del sábado
llevo a cabo la inscripción, recogida de las bolsas para el material en T1 y
T2, dejo la bici en la T1 (sigo alucinando con los maquinones que lleva mucha
gente,… cabras, ruedas lenticulares y de bastones y perfilacos pufffff que
pasada… luego también es verdad que algunos de esos no andan tanto como la
máquina que llevan), poco me importa, mi "competición" siempre es contra mi mismo, es lo que realmente me motiva, poco o nada me importa si acabo en una clasificación el 100 o el 300. Me llama mucho la atención ver un participante con enanismo,
me parece épico, no se si participó en el olímpico (modalidad más corta) o en
el nuestro, pero en cualquier caso chapeu por él…, me doy una vuelta por la
feria del corredor, me voy a la playa a relajarme mirando un ratito el mar, que
por cierto estaba bastante embravecido (tenía intención de tirarme al mar a
nadar 10 minutos tranquilos tal y como me había prescrito el mister, pero con
el mar en este estado ni se me pasa por la cabeza intentarlo), aunque las
previsiones decían que para el día siguiente la cosa estaría ya más tranquila,
y cuando pensaba ya en irme para el hotel para ir preparándome el resto del
material que dejaría en la mañana de la prueba antes de salir, para cenar
temprano etc, total que cuando ya me iba para el coche, se me enciende la bombilla de
que en lo que me han dado no he visto… el microchip!!!, nada un detalle sin
importancia, que si no me lo pongo es como si no hubiera corrido jajaja me
vuelvo y lo recojo en su carpa correspondiente. Míticos despistes míos…
En estos momentos me vienen a la
mente varias cosas de la organización que no me han gustado un pelo. Tenía a
algunxs amigxs preguntándome por internet si se podría seguir “live” nuestras evoluciones en
la prueba, el año pasado había un link desde el cual se podía seguir metiendo
el número de dorsal, este año le pregunté a la organización en su página de
Facebook el día antes, y no contestaron en ningún momento, nada demasiado
sorprendente en todo caso porque según he ido viendo, no contestan
prácticamente nunca a las cuestiones que les plantea la gente en su muro. En ese sentido y en la misma línea, semanas atrás
les envié un par de correos a dos emails distintos preguntándoles si quienes
somos veganxs/vegetarianxs dispondríamos de algo para comer en el catering
post-meta, tampoco me contestaron ninguno de los dos, y por supuesto luego
“efectivamente” como era lamentablemente de esperar, en el catering no había nada para quienes no queremos comer
nada de origen animal (el año pasado también me quedé sin comer, y ya me
dijeron los del catering entonces que ya eramos varias las personas que
habíamos preguntado). Tampoco es tan dificil dejar algunas ensaladas de pasta sin queso ni carne cuando sabes que hay algunas personas que la quieren así, pero por lo visto más fácil aún es pasar del tema olímpicamente. En estos aspectos me ha parecido muy lamentable la
organización, estas cosas me cabrean mucho, este pasotismo para siquiera
dignarse a contestarte aunque sea “no”. Para coger los 180 eurazos de la
inscripción si andan más vivos… en fin, uno que no volverá el año que viene por
cosas como esta.
Así que como iba diciendo, tras terminar
las gestiones en las carpas de inscripción y la zona de transición finalmente,
me voy ya para el hotel y tras los mencionados preparativos y cena, como decía
antes, dormí como un bebé, y sorprendentemente me despierto
solo 10 minutos antes de que suene el despertador, a las 5:30, el primer pilar
para que saliera un día bueno ya estaba puesto.
Venía con las piernas
descargadas tras el masaje de dos días antes de manos de mi buen amigo Alfonso
en su Centro de Salud Integral Crisálida, altamente recomendable para cualquier
cartagenerx/murcianx que necesite de este tipo de cuidados y por tanto tenga a mano poder acudir allí.
A las 6:30 tomo camino y llego a
buena hora para dejar el resto del material en la T1, a continuación me
encuentro con Marta y me lleva ya en su coche a la playa de Cabo Roig, donde
nos extrañamos un poco ya que no vemos a prácticamente nadie (una playa muy
bonita por cierto),… somos los primeros?, voy al wc de un bareto costero por
allí a hacer mi segunda visita al Sr. Roca, tras esto ya nada puede salir mal,
esto suele ser garantía de que luego todo irá bien jeje
Enseguida va llegando más y más
gente, ya casi a las 8:00, supuesta hora de salida para los atletas élite, nos
tiramos al mar a ir calentando, esto tiene la misma pinta que el año pasado en
Arenales, en cuanto a que se va a retrasar la salida y no poco, y efectivamente
así ocurre.
En esas se me enciende la bombilla… he dejado en la bici el estuche
con los recambios por si pincho?, no me jodas!!, la buena de Marta se va al
coche a revisar mi bolsa, por suerte no la encuentra en la misma con lo que he
debido dejarla en la bolsa de la T1, aunque no recuerdo el acto de haberla
dejado allí, con lo que no me quedo tranquilo al 100% pero si bastante más
gracias a Marta, esperemos que cuando llegue allí me la encuentre porque sino
estoy jodido si pincho en la bici y no tengo recambio para reparar…
Pasan los minutos, estoy
tranquilo y confiado, incluso en hacer una buena natación que es con diferencia
la peor de las tres especialidades para mi, por suerte con el neopreno que me
ha dejado mi buen amigo Julián estoy nadando bastante decentemente este año, y
por ello creo que no lo haré del todo mal en este sector para lo que es mi
nivel en esta disciplina, básicamente nivel “supervivencia” jeje
Dan la salida a los élite a las
8:45 creo recordar, esto en Alemania no pasa jeje luego a las chicas y al rato
a los de mi grupo de edad, casi a las 09:00, decido salir de atrás para evitar
llevarme solo las hostias imprescindibles, desde el primer momento por ello voy
pudiendo coger agua relativamente bien aun yendo un poco apretado con la gente
con algún que otro manotazo, se nota que la tensión me lleva el pulso alto
porque tengo que respirar cada dos brazadas cuando lo normal en mi es respirar
cada tres, aunque poco a poco voy tranquilizando la respiración, el agua muy
turbia todo el tiempo y no se ve a dos palmos, voy contento de poder ir
cogiendo agua y poniendo ritmo, a todo esto el mar no estaba por suerte como
ayer aunque tampoco estaba tranquilo ni mucho menos, voy sacando la cabeza cada
poco rato para no irme a Tegucigalpa como suele ser normal en mi y perder la
línea de nado más óptima, en ese sentido creo que voy más o menos bien, cuando
estamos haciendo el largo hacia la Playa de la Glea en todo caso me salgo un
poco hacia afuera para evitar agobios con la gente, aún así me llevo un codazo galáctico bajo la barbilla, por suerte no llevaba la lengua fuera porque me la
podía haber mordido y hacerme un destrozo, al poco rato me llevo un hostión en
la cara importante, pero bueno, el año pasado en Arenales me llevé una tunda
que ni punto de comparación con como va la cosa hasta ahora, así que sigo a lo
mío… en el último tercio más o menos de la natación me empieza a invadir una
sensación como de que no me está saliendo muy super el asunto, coincidiendo con
que el estado de la mar parece que empeora, de pronto veo a la gente de delante como no la
veo (señal de que las olas las tapan), ya se divisa la playa pero por momento
tengo esa fea sensación de que parece que seguimos en el mismo punto y no nos acercamos, joder
cuando se acaba esto??... por fin poco a poco se empieza a ver ya claramente
más cerca, mi objetivo era hacer sobre los 35 minutos y en cuanto ya puedo
poner los pies en el fondo miro el reloj y… 42 minutos, joder que mierda!!,
cual es mi sorpresa adicional cuando veo que según me marca el gps he nadado 2257
metros en lugar de los 1900 que supuestamente tiene la “cuerda” de nado, como
siempre haciendo de las mías yo y mi mítica desorientación en el agua… estamos
apañaos…
En fin, decido no comerme el
coco, es absurdo calentarse mucho la cabeza por una pérdida de unos 5 minutos
respecto a las previsiones, para una prueba que me va a llevar alrededor de 5
horas y media o más… en ese sentido también me lo tomo con relativa calma en la
T1, teniendo especial cuidado en no dejarme nada, meter el neopreno tras
quitármelo en la bolsa y en la cesta para que no me sancionen… aparece el
estuche con los recambios para la bici en la bolsa pufffff menos mal!!, aquí
estabas bandido, lo pongo en uno de los portabidones de la bici… salgo del box
y a dar pedales, empieza lo mío, lo que de verdad disfruto al 100%. La primera
parte es en clara subida hasta coronar el puerto previo a la llegada al pueblo
de San Miguel de Salinas, voy muy a gusto de piernas y acoplado, y cuando la
pendiente sube combino como suele ser habitual en mi, ponerme de pie con
sentarme, aunque acabo por ir bastante rato sentado y cómodo moviendo bien el
desarrollo y acoplándome cada vez que puedo, lo que me va dando mucha confianza
de que la cosa va muy bien físicamente. Primer problema, no me funciona el
pulsómetro del Garmin, supongo que la cinta emisora del pecho ha tragado demasiada
agua de mar, así que nada… “por sensaciones”, ya me conozco suficientemente
para saber cuando me estoy tostando y cuando voy al punto casi sin necesidad de
mirar el pulsómetro… de todas formas al rato acabo por enchufar el Suunto para ir echando
un vistazo al menos de vez en cuando. Voy pasando a bastante gente, por cada
uno que me pasa tengo la sensación de haber pasado a 4 o 5, voy claramente de
atrás hacia adelante…
El circuito es muy “pestoso”, es
la forma en argot ciclista en la que denominamos a un circuito con contínuas
cotas, repechos, toboganes… todo el rato así, es un circuito donde no hay
muchos metros llanos, cuando no estás subiendo estás bajando, lo que hace
complicado sacar una buena media rodadora, aún así voy disfrutando porque las
sensaciones son muy buenas, el pulso me está respondiendo muy bien, ágilmente
me sube en las subidas lo que siempre es buena señal de estar descansado, con
la pila puesta y con unas piernas que carburan para que ese pulso esté dinámico.
Sobre el kilómetro 30 paso un chaval que llevaba la bolsa de la T2 en la
espalda, me quedo flipando y pienso que si estoy pasando a alguien con una
bolsa a la espalda en el kilómetro 30 igual es que no voy tan bien jeje madre
mía se ve cada cosa en la carretera… también te encuentras a gente tirada con
algún problema mecánico usualmente, paso a uno con casco de contrarreloj pero
sin acoples, me cruzo con un hombre mayor con un sobrepeso de 30 kg o más y con un maquinón,
una cabra con rueda lenticular atrás y de bastones delante, siempre vas a ganar
mucho más quitandose unos kilos aunque lleves una bici más modesta.
A todo esto no paraba de sonarme
en la cabeza el Symphony de Zara Larsson y Clean Bandit, pedazo de canción, si
se me llega a meter una de Melendi o de Estopa me pego un tiro…
Por fin llegamos a la zona del
Embalse de la Pedrera, zona en la que se hace una serie de idas y vueltas en
aspa para poder llegar a la distancia de 90 kilómetros en el sector de la bici
antes de la definitiva llegada a Orihuela. En esta zona “disfrutamos” de los
únicos kilómetros relativamente llanos donde puedes acoplarte bien y poner un
poco de velocidad de crucero, salvo un par de repechos que hay. El viento
molesta un poco por momentos pero por suerte hoy no está siendo intenso y la
verdad no ha hecho mucho daño, pasando prácticamente desapercibido, que es la
mejor noticia que se puede tener encima de la bici para con este fenómeno
meteorológico jeje
Voy preocupándome de comer cada
vez que puedo, aunque las barritas y geles que daban en los avituallamientos,
marca Etixx, son aptas para veganxs, me había llevado mis propias barritas de
frutas y geles, y en la zona del embalse me enchufo un gel, seguimos con buenas
sensaciones y muy metido y concentrado en el esfuerzo, no me dejo llevar
prácticamente en ningún momento y aunque voy con cabeza, no tengo la sensación
de estar guardándome prácticamente nada para el sector de la carrera a pie,
esperemos no pagarlo cuando llegue ese momento…
Salimos del bucle del embalse
tras hacer ese tramo una segunda y última vez, hechos ya los otros tres tramos
del bucle en aspa que antes mencionaba, como no, llenos de repechos, cotas y
subidas, que sigo completando a buen ritmo, voy luchando por ir acercando la
media al menos a 30 km/h y poquito a poco lo voy consiguiendo, el circuito no da para
mucho más y forzar la máquina más me podría hacer pagarlo ya seguramente en el
running, ya son muchos años y conozco muy bien mi cuerpo, se donde puedo
llevarlo ajustando el esfuerzo “al punto” sabiendo lo que me queda por delante,
eso siempre es positivo para pruebas de media, larga o muy larga distancia.
Así que por fin tras una última
subida, tomamos definitivamente dirección a Orihuela, en la bajada aprovecho
para comerme otra barrita, se que después en la carrera a pie comer es más
complicado o ya no apetece directamente, así que metemos calorías y energía de
cara a ese último sector, sigo pasando a bastante gente, alguna que ya se está
dejando llevar, entiendo que o bien para guardar fuerzas de cara al último
sector, o porque ya va un poco tocada, cada uno sabe internamente lo que va
rumiando…
Hago los últimos kilómetros de
bici endemoniado, muy rápido y encendido, miro la media y 29,8 km/h, bien
Perico, has hecho un buen sector joder, siempre se puede mejorar pero vamos muy
bien… entrando en Orihuela en 3 horas justas, llego a pie a tierra en 3h02min,
voy tan encendido que se me olvida parar el gps de la bici (con lo que se me
van a ir al traste totalmente los valores del sector y me doy cuenta de ello
cuando ya he entregado la bici a un voluntario y estoy en la carpa cambiándome
las zapatillas), que friki soy joder… bueno, todas las “desgracias” sean esas…
salgo de la carpa y allí está Marta animándome, grande!!.
Sigo llevando las patas
perfectas, de tal manera que mirando el reloj veo que voy incluso demasiado
rápido en principio, marcando al principio un ritmo de 4’40”/km, pienso en
aflojar un poco pero finalmente decido ir dejándome llevar e ir por sensaciones, el
cuerpo se irá ajustando poco a poco a su ritmo, sigo confiando en la
experiencia y simplemente dejo el agua correr a ver como voy progresando. El running se
trata de un circuito de algo más de 5 km al que hay que darle cuatro vueltas,
nos meten por un bonito parque-palmeral y luego ya por el casco histórico de la ciudad,
pasando por la puerta de la casa del poeta Miguel Hernández, que da nombre al
triatlón, y con la meta situada más hacia el centro de la población. Se me va
ajustando y estabilizando poco a poco el ritmo a 4’50”/km, aunque se me va
escapando algún segundo al paso por los avituallamientos donde bebo agua
andando esos metros y eso siempre te baja un poquito la media.
Sigo yendo bastante entero,
pasando a bastante gente, a partir de la tercera vuelta ya se ven las
típicas estampas de gente que ya va definitivamente caminando o alguno
estirando con problemas físicos de calambres y demás, mientras yo voy con la
idea de si puedo apretar los últimos dos kilómetros o así, sin embargo ya en la
cuarta vuelta empiezo a notarme el cansancio, esto en el fondo es una buena
noticia, señal de que no me he guardado nada, que es de lo que se trata, si
llegas a meta entero es porque no lo has dado todo…
En esos momentos donde ya llega
el agotamiento, te das cuenta de lo que debe ser un Ironman, cuando piensas que
tienes que hacer EL DOBLE que hoy… indudablemente no es el mejor momento para
pensar en ello jajaja
Mención especial para lxs
voluntarixs, que se han dejado la piel en todos los sectores, donde más los disfrutas
es en este sector, donde recibes sus ánimos y aplausos, se desviven por
animarte en los cruces y avituallamientos, siempre les doy las gracias a mi
paso, son un 10.
Así que en esos últimos
kilómetros decido no sufrir más de la cuenta y sigo al mismo ritmo, saboreando
que ya lo tengo hecho, como siempre en los últimos metros mucha emoción, beso
el anillo de mi madre que siempre cuelga de mi cuello, señalo al cielo como
siempre dedicándoselo a ella, también me acuerdo de Michele Scarponi,
desgraciadamente fallecido el sábado arrollado por una furgoneta mientras salía
a entrenar desde su casa, un fenomenal ciclista y mejor persona según contaban
quienes le conocían y quienes podíamos comprobar quienes le seguíamos cuando
simplemente le hacían una entrevista y veías que era alguien muy especial, de
esa gente con mucho brillo y luz, siempre con una sonrisa y tan bromista...
hasta la próxima Michele :(
Me acuerdo en esos momentos
también en todxs lxs amigxs que me han dado fuerzas y ánimo durante estos días
pasados, no quiero nombrar a nadie porque sería injusto olvidarme a alguien y
no quiero, ellxs saben quienes han sido y lo que les quiero. También me acuerdo
de mi mister, cuarta temporada ya con él y consiguiendo ya muchas cosas bonitas
juntos en estos años, también de Juangre, que siempre me da sabios consejos y
referencias, y aguanta mis chapas estoicamente cuando tengo alguna duda,
gracias siempre feo.
Tomo la curva de entrada a meta y
allí está Marta animando, entro en meta señalando mi equipación, esa que tanto
orgullo me ha dado y me da “pasear” para que la vean el mayor número de
personas, para que quien tenga un gramo de sentido de la justicia, de
compasión, de respeto a la vida, de empatía, siga comprobando tal y como
seguimos mostrando cada día millones de veganxs en el mundo, deportistas o no,
que NO NECESITAMOS QUE UN CORAZÓN MUERA PARA QUE EL NUESTRO SIGA LATIENDO
Go vegan ❤
Va por ti mamá, siempre va por ti, te quiero y
te echo de menos, cada día que amanece ❤